lunes, 27 de mayo de 2013

#Socialholic



La reseña (y la conclusión) de éste libro es muy fácil y contundente: Tienes que leerlo. Así de claro. En apenas 400 páginas se concentra una base de conocimiento muy interesante si quieres estar al día del Marketing (con M mayúscula) en medios sociales.

Estamos de acuerdo en que internet está cambiando rápidamente y que estamos en una apasionante época. Un cambio en la forma de comunicarnos, de relacionarnos y, si extrapolamos este concepto a las empresas, de hacer negocio. La fragmentación de medios masivos y el auge del concepto 2.0 invalidan el bombardeo y la intromisión publicitaria en el timeline del cliente potencial. Ahora podemos -y tenemos- que ser más cercanos, escuchar, aprender, conversar y fidelizar. Conversar de tú a tú con el cliente.

Fernando y Juan Luis Polo, desde su visión puesta en marcha a través de Territorio Creativo hacen un recorrido por el ecosistema social en el que se ha convertido Internet. Nos desglosan cómo estábamos, hacia donde hemos evolucionado y cómo conseguir nuestros objetivos. Para ello se basan en un texto (#socialholic) cuyo mensaje te va calando poco a poco, cierto es que en mi caso lo han tenido muy fácil porque soy un convencido de las ideas que promueven.

La narración está plagada de ejemplos de aplicación, situaciones vividas, experiencias contadas en primera persona y por terceros… que aportan al mensaje ese plus de cercanía que nos permite creer aún más en los conceptos que estamos absorbiendo.  La verdad es que la cantidad de ideas que aporta el texto requiere –por mi parte- de una segunda lectura donde asentar conocimiento, herramientas y metodología.

Como veis en esta entrada Tc (Territorio Creativo) –por mediación de sus directores Fernando y Juan Luis Polo- han acentuado la vinculación que sentía hacia su marca (Tc). En definitiva, el concepto que promulgan de SCE (Social Media Engagement) lo han conseguido conmigo a base de aportar buenos contenidos a su blog (#TcBlog) cuya publicaciones me llegan vía Facebook o Twitter –entre otros canales- . No tengo ninguna relación con Territorio creativo ni con sus miembros, pero en cierto modo tengo ese espíritu “teceriano”.

Si tuviera que quedarme con un par de ideas de las que #socialholic aporta me quedaría con 2 conceptos para aplicar en toda empresa.

El primero que el centro de toda estrategia en medios sociales tiene que ser el cliente. Sí… podemos gestionar la cuenta de una empresa, pero quien hay detrás de ese perfil es una persona (o personas). En definitiva son personas hablándoles a personas. Debemos de ser capaces de escuchar, aprender, conversar, relacionarnos y fidelizar a nuestros clientes, para ello habrá que aportarles contenido de calidad, entendiendo como tal aquello que le pueda sumar a nuestro cliente potencial.

El segundo, que toda estrategia de marketing en medios sociales tiene que partir de una cultura empresarial orientada en ese sentido. La empresa tiene que asimilar el concepto social y hacer partícipe de ello a toda su estructura.

En definitiva, un manual imprescindible de cómo abordar la revolución social (y no morir en el intento, es decir, que nuestros esfuerzos tenga recompensa) que estamos viviendo estos días y entender, desde el punto de vista de la empresa, de que el canal de comunicación unidireccional ha caducado.

lunes, 20 de mayo de 2013

No me hagas pensar



Que una página web debería de ser directa, donde se identifique claramente su producto o servicio y con una acceso fácil a la información es algo evidente... aunque muchas veces el resultado de nuestra navegación por distintas webs no nos deje esa sensación (y ejemplo, lamentablemente, hay miles)

Steve Krug nos propone aplicar una serie de principios sobre usabilidad en el entorno web para que estas sean fáciles de interactuar y entender... y muchos de estos principios se basan en la aplicación del sentido común.

Hay que conocer como se utiliza la web para saber cómo enfocar su desarrollo y no morir en el intento. La web no se lee, se hojea hasta que se encuentra aquello que nos aporte valor, por lo tanto tienen que ser claras, sencillas, con una navegación rápida... en definitiva, no hay que hacer pensar al usuario ya que si este tiene que pensar cómo hacer las cosas para conseguir la información que desea, perderá la confianza en el sitio.

Podemos destacar algunas ideas que se desarrollan en el texto:

  • Adiós a los textos de relleno y a los discursos  innecesarios que el usuario nunca va a leer, hay que eliminar las palabras innecesarias y optimizar el tiempo de nuestros usuarios. 
  • La navegación por la web debe ser coherente y estructurada sabiendo en todo momento donde nos encontramos. 
  • Además, como somos animales de costumbres, usemos las convenciones generales que se aplican en el campo web... salvo cuando tengamos alguna propuesta mejor. 
  • El diseño de la página principal del sitio web, que tanto dirá de nuestra empresa y de cómo ofrecer una visión conjunta de lo que ofrecemos, teniendo que ser capaz de responder de forma rápida y clara las cuatro preguntas que tenemos en mente al entrar en un sitio por primera vez: ¿Qué es esto? ¿Qué puedo hacer aquí? ¿Que tienen aquí? ¿Por qué debería estar aquí y no en otro lugar?
  • Las pruebas de usabilidad, necesarias para ver como los usuarios utilizan la web y observar si se ajusta al patrón que estábamos deseando o, por el contrario, nuestra idea no se aplica correctamente.

Mención especial merece la realización y edición del libro: Cargado de ejemplos de aplicación, hace que cada idea -que está expresada de forma gráfica- se comprenda de manera muy sencilla. En definitiva un gran trabajo de ilustración.

Además, como no hay nada mejor que predicar con el ejemplo, Krug nos regala una lectura breve pero muy práctica. Información directa y aprovechable 100%... que pese a ser una edición de hace 6 años (2ª edición actualizada) sigue teniendo una vigencia total: Un primer paso para todos aquellos que quieran iniciarse en el desarrollo web y, para aquellos que ya se dedican, propuestas para corregir errores que todos cometemos.

lunes, 13 de mayo de 2013

Haz click aquí



Seguramente alguna vez te habrá pasado que has tenido la necesidad imperiosa de comprar de forma inminente un producto cuando has visto que era la última unidad en stock.

Del mismo modo, cuando alguna web te ofrece algún producto o servicio de forma totalmente gratuita, has tenido la sensación de compromiso hacia ella: "La próxima vez que tenga que comprar esto visitaré primero esta web"

Y seguramente, buscando un producto específico has visto que quien ha comprado ese mismo producto ha comprado otro relacionado... y los has consultado y, seguramente, has añadido a tu carro de la compra.
Pues bien, todo esto son técnicas de neuromárketing aplicadas al diseño de las páginas web con el fin de incrementar las conversiones (más ventas, captar más registros de clientes, ...). En definitiva, se trata de captar la atención de nuestro subconsciente que es quien decide aquello que deseamos... es el que "condiciona" nuestras decisiones, y aunque pensemos que nuestras decisiones se basan en sesudos razonamientos, muchas veces no es así ;-)

Estamos ante un libro recomendable y tremendamente fácil y rápido de leer, ilustrado con un montón de buenos ejemplos, donde se desarrollan algunas de las ideas más habituales para aplicar en el diseño web: Si bien muchas son conocidas y obvias no por eso dejan de tener validez.

Por ejemplo, como animales sociales que somos, damos mucha importancia a lo que piense el grupo... y en el campo web estamos hablando (nuestro grupo) de usuarios con perfiles con los que nos podemos ver identificados. Lo que opinen nos condiciona y de ahí la importancia de incluir, por ejemplo, recomendaciones que hacen otros usuarios, compra de productos relacionados (el ejemplo puesto en el tercer párrafo), estadísticas del tipo el 70% de los usuarios que compraron esto también compraron esto otro...

Jugar con la escasez de producto, con la reducción de tiempo de compra y/o servicio -compra inmediata-, ofrecer un cantidad de opciones de producto limitada -para no distraer al usuario y que el proceso de decisión sea muy sencillo-, crear mecanismos de vinculación para generar sentimientos de "deuda" -y conseguir fidelidad del usuario-, hacer un uso adecuado de las imágenes y ser capaces de contar historias son algunos de los consejos a aplicar... En definitiva, ideas para aplicar con el objetivo de que la mayor cantidad de visitas a nuestra web acaben en conversión (más ventas, más registros, más visitas...)
Ahora que ya lo sabes... antes de hacer clic piensa si realmente estás convencido de tu compra... ;-)

lunes, 6 de mayo de 2013

Crea tu proyecto Tube



Dice que una imagen vale más que mil palabras. Aunque uno que es muy aficionado a esto de las palabras, piensa que a veces una palabra es mejor que mil imágenes, pero está claro que el contenido visual es muy atractivo para el consumidor… además de ser muy fácil.

Las nuevas plataformas para subir videos a la red han hecho que compartir nuestros proyectos media sea mucho más sencillo que antes. Además, el cambio que estamos viviendo en internet donde el usuario tiene mayor protagonismo –hemos pasado de ser meros consumidores a ser generadores de contenido-, permiten a cualquiera que tenga una idea, ejecutarla sin un coste prohibitivo y darla a conocer por canales que hasta hace pocos años no existían. No hace falta ser un profesional del video para realizar producciones atractivas (como nos demuestra Roger Cusa con algunos de los ejemplos con los que ilustra el libro)

El video online se ha convertido en una herramienta muy importante para hacer negocios, bien sea de forma directa o creando marca personal que monetice en posteriores acciones. Cualquier sector empresarial puede obtener ventajas con el uso del video online, si bien es cierto que la industria del entretenimiento (Internetenimiento) lo tiene más sencillo por la propia filosofía de uso de sitios como YouTube o Facebook (los principales proveedores de contenidos).

El éxito de nuestro proyecto pasará por aplicar grandes dosis de pasión, talento y paciencia a partes iguales: Tenemos que tener un mensaje que “venda”, saber como hacerlo y entender que no va a ser llegar y besar el santo, que necesitamos que nos conozcan

Para ello, nuestro camino tiene que seguir una planificación para que tengamos condiciones de triunfar (aunque siempre habrán excepciones): Identificar qué somos –nuestra marca-, crear un mensaje único y atractivo e identificar a nuestro público (para crear una comunidad entorno a nuestro proyecto) tiene que ser el punto de partida de nuestro proyecto. Asimismo, tenemos que conocer los medios donde nos vamos a mover y saber difundir nuestro mensaje. Si conseguimos lo anterior –que no es sencillo-, ya solo nos falta monetizar.

En este libro –de lectura fácil y amena- Roger Cusa analiza todas las posibilidades del video en Internet a través historias que podemos encontrar en Internet y que nos pueden servir de fuente de inspiración. Muchos de los ejemplos que encontramos en el libro –y en el día a día si somos seguidores de sitios como YouTube- corresponden a proyectos que, antes de ser fenómenos de masas, se inspiraron en otros casos existentes, en definitiva se aplicaron aquello de “yo también puedo hacerlo”… así que ahora solo falta tu talento para convertir en un nuevo fenómeno Justin Bieber ;-)